Cada vez más voces se alzan en contra de la denominada fast fashion, colecciones de moda diseñadas y producidas a una velocidad de vértigo y que, como consecuencia de su bajo precio y calidad, duran poco.

Sin embargo, en el lado contrario, se encuentran marcas como Lacambra, empresa española especializada en bolsos con más de una década de recorrido, que apuesta por reciclar sus propios modelos para ayudar a sus clientes a ser más responsables y consumir mejor.

“Desde el principio buscamos que los pilares de nuestra marca fueran la calidad, el diseño y la enseña Made in Spain” comenta su creadora, Cristina Álvarez Lacambra, quien comenzó trabajando en la mesa de su comedor en 2011 y quien hoy, desde su local en Madrid y desde su web, vende a todo el mundo los productos producidos en talleres artesanos tanto de la capital como de Ubrique.

ReNUEVO, una campaña para fomentar la segunda oportunidad.

La campaña reNUEVO tiene un claro objetivo: dar una segunda oportunidad a sus modelos anteriores. Así, ofrecen la recogida de sus bolsos a cambio de un vale descuento de un importe que oscilaría entre el 10 y 30% del valor que en su día costara.

Es la respuesta a una doble demanda: por un lado la de clientes que siguen después de años usando los bolsos y que no quieren tirarlos porque siguen en buen estado y la de sus seguidores en redes que proponían comprar piezas con tara para intentar abaratar el precio de sus últimos lanzamientos (los bolsos grandes de nueva colección pueden encontrarse en un abanico de precios que parte de los 150 euros).

Con esta campaña, ayuda a sus clientes más fieles a adquirir nuevos modelos mientras que, al recomprar sus modelos, los limpian y reparan para volver a darles una oportunidad de segunda mano a un precio más bajo. 

 “Tenemos clientes muy fieles que siguen usando bolsos nuestros comprados hace años que nos decían que los tienen en muy buen estado y que les daba pena tirarlos o dejar de usarlos, y por otra parte tenemos seguidores y clientes que nos pedían que les avisáramos de piezas con taras o con precio rebajado, puesto que los precios de nuestros bolsos grandes (entre 150 y 250 €) no les entraban en precio, y así es como se nos ocurrió la idea” comentan desde la compañía.