Muchos son los que dicen que los sueños se cumplen, pero pocos son los valientes que se atreven a hacerlos realidad. Y ahí reside la gran diferencia.

Una disciplina prácticamente nueva en España, que poco a poco va abriéndose hueco entre las actividades físicas más comunes; el Pole Sport combina fuerza, resistencia, flexibilidad y coreografía dentro de un mismo ejercicio, y en Andalucía pese a que cada vez  hay más escuelas y academias donde aprender a practicarlo, no son tantas las que hacen de sus alumnas unas artistas.

Aerial Dreams Sevilla destaca entre todas ellas, no sólo aferrándose al lado más deportivo de la disciplina, sino al más artístico digno de las más grandes interpretaciones dentro del ámbito escénico. Llevan consigo numerosas clasificaciones por parte de su equipo en diversos campeonatos nacionales, y si ya destacan por sus números y coreografías, hoy domingo dieciocho de junio de 2017, han vuelto a dar la talla en uno de los eventos más importantes en la capital andaluza. Y no era para menos, la escuela celebraba por todo lo alto la apertura de su nuevo centro en Plaza de Armas.

El resultado de meses de entrenamiento, de cardenales en el cuerpo, estrictas dietas, costes en materiales y vestuario, maquillaje, escenografía, elementos audiovisuales, estrés y nervios se resumen en un tiempo máximo de cinco minutos.

Las alumnas, que ahora competidoras, se levantan muy temprano para comenzar con su usual rutina ‘polera’. Después de horas de maquillaje para la perfecta caracterización de su personaje, siempre incluyendo en él una historia personal de las mismas, se preparan para la prueba de barras, informando a las demás compañeras de su estado, ya que si están muy resbaladizas utilizarán magnesio y otros productos para evitar caídas que deriven en lesiones y las alejen de su sueño.

Concluida la prueba general, las puertas al público se abren y empiezan a brotar las emociones. El apoyo hacia sus compañeras es incondicional, se animan entre ellas cada vez que una actúa, esperan ansiosas la llegada de su turno para dar lo mejor de ellas mismas, y colaboran con la limpieza de las barras entre acto y acto.

Su unión las hace fuertes.